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Noticias

Artículo de opinión:
“Una visión personal: El Dividendo Digital, el desarrollo de las TIC
y el futuro de la Televisión en abierto en España”
Miguel Ángel García Argüelles. Director Gerente de FENITEL
En mi desempeño profesional como Director‐Gerente en FENITEL puedo y debo decir que, en las múltiples actividades que desde la Federación se han desarrollado, y desarrollan, mediante el liderazgo, la colaboración o la participación, a lo largo de sus ya 34 años de historia, FENITEL, nunca se ha visto en entredicho por no haber podido avalar con los hechos una propuesta o afirmación suscrita por su representación al más alto nivel. En, con y junto a, FENITEL han estado, están y estarán los verdaderos expertos de la “última milla” de España. Los conocedores de la realidad de sus mercados.
Solo por citar algunas referencias de los últimos años de la historia, y presente…., de la Federación, ya sea en nuestro liderazgo o contribución al nacimiento y desarrollo permanente de la normativa de ICT –Infraestructuras Comunes de Acceso a los Servicios de Telecomunicaciones en el interior de los Edificios‐, de la regulación de la actividad de las Empresas Instaladoras e Integradoras de Telecomunicación, de la definición y desarrollo del “Hogar Digital”, del CCTV, del encendido de la TDT……. , entre otros muchos ejemplos, permiten corroborar mi, primera, afirmación.
En base a esa visión, al ejemplo recibido, al conocimiento día a día adquirido que siempre es poco…..., me permito realizar las siguientes reflexiones, con la legitimidad que da desempeñar una función profesional en defensa de los intereses legítimos y transparentes de nuestras asociaciones y empresarios representados, intereses íntimamente relacionados con toda la Industria y las Administraciones Públicas, pero sobre todo con sus clientes principales: los usuarios finales, a la postre, los clientes de todos.
La TDT y el Dividendo Digital:
En el año 2007, la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones decidió que la asignación de la banda de 790‐862 MHz fuera compartida entre los servicios de radiodifusión y televisión y los servicios móviles para telefonía de banda ancha. Diversos países de la Unión Europea acordaron, posteriormente, armonizar el uso de esas frecuencias para el servicio móvil y desplazar la TDT a la parte inferior de la banda de UHF, cuestión que la UE impuso como obligatoria en marzo de 2012. Se conoce como “dividendo digital” el proceso mediante el cual las frecuencias comprendidas entre 790 y 862 MHz (equivalente a los canales 61 al 69 de UHF) dejarán de ser usadas para transmisión de TDT, por haber sido asignadas a las compañías operadoras de comunicaciones electrónicas para prestar servicios de banda ancha ultrarrápida en movilidad. Si bien para muchos de los países europeos, este cambio no representa un gran problema pues, por razones históricas, la parte superior de la banda no se utilizaba mayoritariamente para la televisión, sí lo es para países que, como España, han desarrollado masivamente la TDT en esta parte del espectro radioeléctrico.
Esta banda de frecuencias, junto con otra en 2’6 GHz, fue subastada en España, a mediados del año 2011, reportando el proceso unos ingresos para el Estado por valor de 1.305 M€. Los adjudicatarios del dividendo digital han sido Telefónica, Vodafone y Orange, los cuales ya 1
abonaron el 50% de la puja el pasado año 2011, y la cantidad restante la deben ingresar en el Tesoro a lo largo del año 2012.
La subasta establecía la disponibilidad de las frecuencias, por parte de los operadores que resultaran adjudicatarios de los derechos de utilización, a partir del 1 de enero de 2015, pero el Gobierno, según declaraciones del Ministro de Industria, Energía y Turismo pretende adelantar en un año, hasta el 31/12/2013, la fecha de liberación de dichas frecuencias, con el propósito de anticipar en lo posible la introducción en el mercado de las tecnologías 4G/LTE (banda ancha ultrarrápida en movilidad) y de esta manera fomentar el progreso de la sociedad de la Información en nuestro país. Cabe destacar que estas frecuencias actualmente están siendo utilizadas para emitir los principales programas (canales en términos de usuario) de la TDT, todos los privados y prácticamente el 50% de los correspondientes a RTVE y de las televisiones autonómicas.
En consecuencia, si se confirma el propósito del Gobierno de acortar el plazo fijado, habrá que acelerar el desalojo de los canales radioeléctricos, ahora utilizados para difundir buena parte de los programas de TDT, mediante el establecimiento de nuevos transmisores en las nuevas frecuencias, informar a los espectadores de estos cambios, re‐antenizar los edificios… para así posibilitar la recepción de las nuevas frecuencias y comprobar que las audiencias se han desplazado al nuevo escenario de difusión. Este proceso, más complejo si cabe que el cese de emisiones analógicas, debe ser definido y ordenado a la mayor brevedad posible, atribuyendo las diferentes responsabilidades a todos los implicados en el mismo.
El futuro de la Televisión en abierto, es la Televisión de Alta Definición (HD)
La televisión, como industria de creación y emisión de contenidos, está transformándose para poder ofrecer sus contenidos a las distintas plataformas: cable, satélite, terrestre, IP, etc. en alta definición. Ya no se producen series, documentales en definición estándar, entre otras cuestiones porque los equipamientos actuales son de HD y porque la comercialización en mercados exteriores, solo se puede hacer en ese formato. Es por ello que una plataforma, en este caso la mayoritaria cual es la difusión terrestre, no puede quedar coartada, limitada en sus posibilidades e impedir que se pueda transmitir en alta definición.
El equipamiento de los usuarios:
Las nuevas pantallas que se comercializan, las nuevas televisiones principales de los hogares españoles, son en su práctica totalidad HD, en correspondencia con la normativa que obliga a comercializar equipos preparados para sintonizar y mostrar señales de HD desde diciembre de 2009. Se puede estimar que, en la actualidad, el parque de televisores en España, dotados con estas características podría ya superar los 12 millones de unidades.
En el mercado español, ya sea en las grandes superficies, desde las especializadas a las generalistas o en el retail la oferta es HD, tanto en equipos de gama alta como en los de oferta u ocasión. Además, todo tipo de empresas (entidades financieras, aseguradoras etc.) generan ofertas de fidelización a sus clientes basadas en receptores HD, lo que aumenta su popularización.
La industria de producción audiovisual:
Actualmente todos los grandes eventos deportivos internacionales: Fútbol, F1, Motociclismo, Tenis, Ciclismo, etc. y por supuesto los Juegos Olímpicos, se realizan y comercializan exclusivamente en HD.
Del mismo modo en el caso de las nuevas producciones de cine, series, documentales, y en general, en toda la producción televisiva destinada al gran público de carácter internacional, se ha unificado en el formato de HD la realización y comercialización de todos los productos, quedando el formato tradicional, cada día más, como residual.
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La Televisión en HD y la TDT
En España, y en el resto de Europa, en el proceso de digitalización de la televisión terrestre, la televisión esencialmente gratuita, ha primado en la primera fase el aumento del número de canales emitidos, dejando para una fase posterior aspectos relacionados con la mejora, aún más potente respecto a la analógica, de su calidad de emisión‐recepción, que está viniendo dada por su lógica evolución hacia la HD, tal y como he señalado anteriormente, y como ya está ocurriendo en estos momentos en Francia y Reino Unido, por citar dos ejemplos líderes en la materia.
Fruto de esta política, algunos países de la UE entre los que se encuentra España, no apostaron inicialmente por la introducción de la Alta Definición, debido a la inexistencia de receptores a precios asequibles en ese momento. Sin embargo es justo destacar que, gracias al esfuerzo de RTVE y también varios de los miembros de la FORTA, al que se van sumando progresivamente los radiodifusores privados, el proceso de introducción de la HD se está realizando, rápidamente, en nuestro país.
El futuro de la Televisión en abierto en España.
En consecuencia con lo expuesto, los operadores de televisión, los radiodifusores, en España se enfrentan hoy en día a un reto tecnológico, crítico y fundamental para garantizar su futuro: Esencialmente, podemos resumirlo en que la gran mayoría de los contenidos que adquieren y producen son HD, todo su equipamiento técnico nuevo es HD y, lo que es más importante, los usuarios, los hogares, la audiencia cada día más es HD.
Pero, si el espectro radioeléctrico que se destina a la televisión sustancialmente en abierto, tanto la privada como la de servicio público, se redujera, ello provocará en el corto/medio plazo que, la forma principal por la que los españoles acceden a la televisión, la TDT, no podrá tener el mismo nivel de calidad de emisión‐recepción que la ofertada por otros tipos de tecnologías, quebrándose así, muy probablemente, el modelo del actual mercado audiovisual español que, aunque en ocasiones denostado, es el único que emite en abierto contenidos “premium”, contenidos que en el resto del mundo son prácticamente exclusivos de la televisión de pago, tales como grandes eventos deportivos: fútbol de alta competición, F1 , mundial de motociclismo, grandes vueltas ciclistas, series de gran audiencia, ya sean de producción nacional como internacional, típicamente emitidas en el resto del mundo en canales de pago tales como HBO, SKY etc. etc.
En este contexto, resulta clave que la TDT pueda disponer de suficientes canales radioeléctricos en UHF, para poder emitir en HD, cuanto antes mejor…, los contenidos adquiridos o producidos en este formato, y que en breve plazo serán todos los contenidos. Lo contrario supondría que, en abierto y sin que sea exigible mediar cuota de abono o pago por evento, todos los contenidos serán emitidos en TDT con calidad notablemente inferior a la que se han producido y notablemente inferior a las posibilidades de que disponen en sus domicilios los usuarios por sus nuevos televisores en HD.
En mi opinión, si se diera esta situación, se estaría cometiendo un grave error ya que, actualmente, existe capacidad suficiente en el espectro radioeléctrico para, al menos, disponer de 9 múltiplex para la televisión privada y pública (tanto de ámbito estatal como autonómica). La atribución de esos múltiplex no ocasionaría ningún perjuicio o retraso, a la necesaria introducción de los servicios de banda ancha en movilidad , 4G/LTE, imprescindibles para el desarrollo de la sociedad de la información y para cumplir la Agenda Digital Europea 2020 y también la nueva Agenda Digital Española liderada por el Gobierno.
La convergencia tecnológica: Broadcasting y la banda ancha fija y móvil
Henry Ford dijo que, “el verdadero progreso es el que pone la tecnología al alcance de todos” y es un hecho, empíricamente demostrado, que las tecnologías convergen y se integran más que se sustituyen de la noche a la mañana, salvo que éstas no sean útiles, pierdan el favor de sus usuarios, queden obsoletas o se fuerce su obsolescencia. 3
El Broadcasting y la banda ancha fija y móvil convergen también en el nuevo “Hogar Digital” en la televisión híbrida (HbbTV), entre otras soluciones tecnológicas, y seguirán convergiendo, pero el ritmo de convergencia lo marca y lo seguirá marcando la oferta y la demanda pero, esencialmente, el usuario o cliente según sea usuario o abonado.
Nadie que conozca el mercado de la televisión en España, puede obviar la importancia del componente social que le es inherente; existen amplias capas sociales de población para las que la televisión constituye un medio básico de unión con el mundo exterior a su hogar y, en muchos casos, su único medio de información y entretenimiento; además, y por desgracia, estas capas de la sociedad son las menos preparadas para afrontar un cambio tecnológico en poco tiempo. Resulta imprescindible que, en la medida de lo posible, la evolución tecnológica se acompase a las posibilidades reales de asimilación de los cambios por parte de los usuarios finales.
Un error clásico del pasado, en algunos casos muy significativos, ha sido anteponer la tecnología a la demanda de los consumidores; generalmente, estos intentos han concluido con el fracaso del proceso de implantación de la nueva tecnología al menos en ese momento, por lo que, aprendiendo de los errores cometidos, deberíamos de acometer los cambios con la prudencia necesaria.
Así, y con la coyuntura socio‐económica actual, y a pesar de que en nuestra sociedad “cuasi‐digital” se ha producido un significativo aumento del uso intensivo de las redes sociales, de los smartphones, y de todo tipo de “gadgets” y redes con acceso a internet fijo/móvil, el consumo de televisión marcó en, 2012, record históricos, en España superando las cuatro horas y media por persona y día. Y no se puede ni se debe obviar en ningún caso que, la recepción de la Televisión en España segmentada según su consumo en 2012 sigue teniendo la siguiente distribución: TDT (79,6%) el Cable/IPTV (14,8%) y el Satélite (5,6%). Estos datos corresponden al primer televisor del hogar en el segundo, si existe, la TDT prácticamente supone el 100%. Lógicamente, la convergencia con las redes de banda ancha, tanto fijas como móviles, sigue avanzando y lo seguirá haciendo en el futuro, pero su ritmo de crecimiento lo marcará en todo caso, la oferta y sobre todo la demanda: el usuario final.
Por último, y no por ello menos importante (y menos en la actual coyuntura económica), la industria audiovisual, la fabricante española especialista y líder mundial en su segmento, y las empresas instaladoras e integradoras de telecomunicaciones verdaderos expertos en la “última milla”, todos en su conjunto, precisan de plazos razonables y estabilidad en los mercados para continuar su ya iniciada evolución, manteniendo el liderazgo; un cambio brusco provocaría la pérdida de miles de puestos de trabajo en pymes y micropymes, así como un serio riesgo de deslocalización de creación, innovación y producción/fabricación en uno de los pocos segmentos, en los que la industria española tiene presencia significativa en el contexto internacional.
El proceso de “re‐antenización” con motivo de la liberación del Dividendo Digital.
Los representantes de la industria española de diseño y fabricación de equipos de recepción y distribución de señales de televisión, líderes mundiales en su segmento, junto con FENITEL, y como actores necesarios en la implantación del proyecto de liberación de frecuencias denominado Dividendo Digital, partiendo de la información que figura en el borrador de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), se han dirigido recientemente al Ministerio de Industria, el pasado 17 de abril, señalando las cuestiones clave que, los representante de los mayores expertos en España en la materia, entienden deben y pueden darse para garantizar a la sociedad, a los radiodifusores y al Gobierno de España, en el contexto socio‐económico que estamos viviendo, una liberación del Dividendo Digital con éxito.
Conclusiones:
Desde FENITEL, se refrenda, una vez mas, el compromiso del sector con el desarrollo de las TIC, de la Sociedad de la Información en España. Como no podía ser de otra forma la Federación Nacional de Instaladores e Integradores de Telecomunicaciones apoya, de forma 4
incuestionable, el desarrollo y despliegue de las redes de acceso ultrarrápido, tanto fijas como móviles, como base del progreso de nuestra sociedad, y como desarrollo de la propia actividad presente y futura de sus empresas representadas. Ahora bien, entendemos que este despliegue de las nuevas redes puede y debe realizarse de forma compatible con la presencia en el mercado de tecnologías, solo aparentemente mas tradicionales que, hoy en día, suponen la única forma posible de acceder a servicios de interés público como la televisión, para una inmensa mayoría de los usuarios, los ciudadanos de España. De no proceder de esta manera, corremos el serio riesgo de que los punteros sectores de la fabricación y de la instalación e integración, entre otros, queden debilitados, quien sabe si de forma irreversible, y resulte así inviable cumplir los objetivos de desarrollo fijados tanto en la Agenda Digital Europea 2020, como en la nueva Agenda Digital Española.
Pensando y creyendo en el interés general, decir no por más alto más claro: NECESITAMOS SEGURIDAD JURÍDICA.
26 de abril de 2012

Artículo de opinión: Miguel Ángel García Argüelles.

Director Gerente de FENITEL

En mi desempeño profesional como Director‐Gerente en FENITEL puedo y debo decir que, en las múltiples actividades que desde la Federación se han desarrollado, y desarrollan, mediante el liderazgo, la colaboración o la participación, a lo largo de sus ya 34 años de historia, FENITEL, nunca se ha visto en entredicho por no haber podido avalar con los hechos una propuesta o afirmación suscrita por su representación al más alto nivel. En, con y junto a, FENITEL han estado, están y estarán los verdaderos expertos de la “última milla” de España. Los conocedores de la realidad de sus mercados.

Solo por citar algunas referencias de los últimos años de la historia, y presente…., de la Federación, ya sea en nuestro liderazgo o contribución al nacimiento y desarrollo permanente de la normativa de ICT –Infraestructuras Comunes de Acceso a los Servicios de Telecomunicaciones en el interior de los Edificios‐, de la regulación de la actividad de las Empresas Instaladoras e Integradoras de Telecomunicación, de la definición y desarrollo del “Hogar Digital”, del CCTV, del encendido de la TDT……. , entre otros muchos ejemplos, permiten corroborar mi, primera, afirmación.

En base a esa visión, al ejemplo recibido, al conocimiento día a día adquirido que siempre es poco…..., me permito realizar las siguientes reflexiones, con la legitimidad que da desempeñar una función profesional en defensa de los intereses legítimos y transparentes de nuestras asociaciones y empresarios representados, intereses íntimamente relacionados con toda la Industria y las Administraciones Públicas, pero sobre todo con sus clientes principales: los usuarios finales, a la postre, los clientes de todos.

La TDT y el Dividendo Digital:

En el año 2007, la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones decidió que la asignación de la banda de 790‐862 MHz fuera compartida entre los servicios de radiodifusión y televisión y los servicios móviles para telefonía de banda ancha. Diversos países de la Unión Europea acordaron, posteriormente, armonizar el uso de esas frecuencias para el servicio móvil y desplazar la TDT a la parte inferior de la banda de UHF, cuestión que la UE impuso como obligatoria en marzo de 2012. Se conoce como “dividendo digital” el proceso mediante el cual las frecuencias comprendidas entre 790 y 862 MHz (equivalente a los canales 61 al 69 de UHF) dejarán de ser usadas para transmisión de TDT, por haber sido asignadas a las compañías operadoras de comunicaciones electrónicas para prestar servicios de banda ancha ultrarrápida en movilidad. Si bien para muchos de los países europeos, este cambio no representa un gran problema pues, por razones históricas, la parte superior de la banda no se utilizaba mayoritariamente para la televisión, sí lo es para países que, como España, han desarrollado masivamente la TDT en esta parte del espectro radioeléctrico.

Esta banda de frecuencias, junto con otra en 2’6 GHz, fue subastada en España, a mediados del año 2011, reportando el proceso unos ingresos para el Estado por valor de 1.305 M€. Los adjudicatarios del dividendo digital han sido Telefónica, Vodafone y Orange, los cuales ya 1abonaron el 50% de la puja el pasado año 2011, y la cantidad restante la deben ingresar en el Tesoro a lo largo del año 2012.

La subasta establecía la disponibilidad de las frecuencias, por parte de los operadores que resultaran adjudicatarios de los derechos de utilización, a partir del 1 de enero de 2015, pero el Gobierno, según declaraciones del Ministro de Industria, Energía y Turismo pretende adelantar en un año, hasta el 31/12/2013, la fecha de liberación de dichas frecuencias, con el propósito de anticipar en lo posible la introducción en el mercado de las tecnologías 4G/LTE (banda ancha ultrarrápida en movilidad) y de esta manera fomentar el progreso de la sociedad de la Información en nuestro país. Cabe destacar que estas frecuencias actualmente están siendo utilizadas para emitir los principales programas (canales en términos de usuario) de la TDT, todos los privados y prácticamente el 50% de los correspondientes a RTVE y de las televisiones autonómicas.

En consecuencia, si se confirma el propósito del Gobierno de acortar el plazo fijado, habrá que acelerar el desalojo de los canales radioeléctricos, ahora utilizados para difundir buena parte de los programas de TDT, mediante el establecimiento de nuevos transmisores en las nuevas frecuencias, informar a los espectadores de estos cambios, re‐antenizar los edificios… para así posibilitar la recepción de las nuevas frecuencias y comprobar que las audiencias se han desplazado al nuevo escenario de difusión. Este proceso, más complejo si cabe que el cese de emisiones analógicas, debe ser definido y ordenado a la mayor brevedad posible, atribuyendo las diferentes responsabilidades a todos los implicados en el mismo.

El futuro de la Televisión en abierto, es la Televisión de Alta Definición (HD)

La televisión, como industria de creación y emisión de contenidos, está transformándose para poder ofrecer sus contenidos a las distintas plataformas: cable, satélite, terrestre, IP, etc. en alta definición. Ya no se producen series, documentales en definición estándar, entre otras cuestiones porque los equipamientos actuales son de HD y porque la comercialización en mercados exteriores, solo se puede hacer en ese formato. Es por ello que una plataforma, en este caso la mayoritaria cual es la difusión terrestre, no puede quedar coartada, limitada en sus posibilidades e impedir que se pueda transmitir en alta definición.

El equipamiento de los usuarios:

Las nuevas pantallas que se comercializan, las nuevas televisiones principales de los hogares españoles, son en su práctica totalidad HD, en correspondencia con la normativa que obliga a comercializar equipos preparados para sintonizar y mostrar señales de HD desde diciembre de 2009. Se puede estimar que, en la actualidad, el parque de televisores en España, dotados con estas características podría ya superar los 12 millones de unidades.

En el mercado español, ya sea en las grandes superficies, desde las especializadas a las generalistas o en el retail la oferta es HD, tanto en equipos de gama alta como en los de oferta u ocasión. Además, todo tipo de empresas (entidades financieras, aseguradoras etc.) generan ofertas de fidelización a sus clientes basadas en receptores HD, lo que aumenta su popularización.

La industria de producción audiovisual:

Actualmente todos los grandes eventos deportivos internacionales: Fútbol, F1, Motociclismo, Tenis, Ciclismo, etc. y por supuesto los Juegos Olímpicos, se realizan y comercializan exclusivamente en HD.

Del mismo modo en el caso de las nuevas producciones de cine, series, documentales, y en general, en toda la producción televisiva destinada al gran público de carácter internacional, se ha unificado en el formato de HD la realización y comercialización de todos los productos, quedando el formato tradicional, cada día más, como residual.

La Televisión en HD y la TDT

En España, y en el resto de Europa, en el proceso de digitalización de la televisión terrestre, la televisión esencialmente gratuita, ha primado en la primera fase el aumento del número de canales emitidos, dejando para una fase posterior aspectos relacionados con la mejora, aún más potente respecto a la analógica, de su calidad de emisión‐recepción, que está viniendo dada por su lógica evolución hacia la HD, tal y como he señalado anteriormente, y como ya está ocurriendo en estos momentos en Francia y Reino Unido, por citar dos ejemplos líderes en la materia.

Fruto de esta política, algunos países de la UE entre los que se encuentra España, no apostaron inicialmente por la introducción de la Alta Definición, debido a la inexistencia de receptores a precios asequibles en ese momento. Sin embargo es justo destacar que, gracias al esfuerzo de RTVE y también varios de los miembros de la FORTA, al que se van sumando progresivamente los radiodifusores privados, el proceso de introducción de la HD se está realizando, rápidamente, en nuestro país.

El futuro de la Televisión en abierto en España.

En consecuencia con lo expuesto, los operadores de televisión, los radiodifusores, en España se enfrentan hoy en día a un reto tecnológico, crítico y fundamental para garantizar su futuro: Esencialmente, podemos resumirlo en que la gran mayoría de los contenidos que adquieren y producen son HD, todo su equipamiento técnico nuevo es HD y, lo que es más importante, los usuarios, los hogares, la audiencia cada día más es HD.

Pero, si el espectro radioeléctrico que se destina a la televisión sustancialmente en abierto, tanto la privada como la de servicio público, se redujera, ello provocará en el corto/medio plazo que, la forma principal por la que los españoles acceden a la televisión, la TDT, no podrá tener el mismo nivel de calidad de emisión‐recepción que la ofertada por otros tipos de tecnologías, quebrándose así, muy probablemente, el modelo del actual mercado audiovisual español que, aunque en ocasiones denostado, es el único que emite en abierto contenidos “premium”, contenidos que en el resto del mundo son prácticamente exclusivos de la televisión de pago, tales como grandes eventos deportivos: fútbol de alta competición, F1 , mundial de motociclismo, grandes vueltas ciclistas, series de gran audiencia, ya sean de producción nacional como internacional, típicamente emitidas en el resto del mundo en canales de pago tales como HBO, SKY etc. etc.

En este contexto, resulta clave que la TDT pueda disponer de suficientes canales radioeléctricos en UHF, para poder emitir en HD, cuanto antes mejor…, los contenidos adquiridos o producidos en este formato, y que en breve plazo serán todos los contenidos. Lo contrario supondría que, en abierto y sin que sea exigible mediar cuota de abono o pago por evento, todos los contenidos serán emitidos en TDT con calidad notablemente inferior a la que se han producido y notablemente inferior a las posibilidades de que disponen en sus domicilios los usuarios por sus nuevos televisores en HD.

En mi opinión, si se diera esta situación, se estaría cometiendo un grave error ya que, actualmente, existe capacidad suficiente en el espectro radioeléctrico para, al menos, disponer de 9 múltiplex para la televisión privada y pública (tanto de ámbito estatal como autonómica). La atribución de esos múltiplex no ocasionaría ningún perjuicio o retraso, a la necesaria introducción de los servicios de banda ancha en movilidad , 4G/LTE, imprescindibles para el desarrollo de la sociedad de la información y para cumplir la Agenda Digital Europea 2020 y también la nueva Agenda Digital Española liderada por el Gobierno.

La convergencia tecnológica: Broadcasting y la banda ancha fija y móvil

Henry Ford dijo que, “el verdadero progreso es el que pone la tecnología al alcance de todos” y es un hecho, empíricamente demostrado, que las tecnologías convergen y se integran más que se sustituyen de la noche a la mañana, salvo que éstas no sean útiles, pierdan el favor de sus usuarios, queden obsoletas o se fuerce su obsolescencia.

El Broadcasting y la banda ancha fija y móvil convergen también en el nuevo “Hogar Digital” en la televisión híbrida (HbbTV), entre otras soluciones tecnológicas, y seguirán convergiendo, pero el ritmo de convergencia lo marca y lo seguirá marcando la oferta y la demanda pero, esencialmente, el usuario o cliente según sea usuario o abonado.

Nadie que conozca el mercado de la televisión en España, puede obviar la importancia del componente social que le es inherente; existen amplias capas sociales de población para las que la televisión constituye un medio básico de unión con el mundo exterior a su hogar y, en muchos casos, su único medio de información y entretenimiento; además, y por desgracia, estas capas de la sociedad son las menos preparadas para afrontar un cambio tecnológico en poco tiempo. Resulta imprescindible que, en la medida de lo posible, la evolución tecnológica se acompase a las posibilidades reales de asimilación de los cambios por parte de los usuarios finales.

Un error clásico del pasado, en algunos casos muy significativos, ha sido anteponer la tecnología a la demanda de los consumidores; generalmente, estos intentos han concluido con el fracaso del proceso de implantación de la nueva tecnología al menos en ese momento, por lo que, aprendiendo de los errores cometidos, deberíamos de acometer los cambios con la prudencia necesaria.

Así, y con la coyuntura socio‐económica actual, y a pesar de que en nuestra sociedad “cuasi‐digital” se ha producido un significativo aumento del uso intensivo de las redes sociales, de los smartphones, y de todo tipo de “gadgets” y redes con acceso a internet fijo/móvil, el consumo de televisión marcó en, 2012, record históricos, en España superando las cuatro horas y media por persona y día. Y no se puede ni se debe obviar en ningún caso que, la recepción de la Televisión en España segmentada según su consumo en 2012 sigue teniendo la siguiente distribución: TDT (79,6%) el Cable/IPTV (14,8%) y el Satélite (5,6%). Estos datos corresponden al primer televisor del hogar en el segundo, si existe, la TDT prácticamente supone el 100%. Lógicamente, la convergencia con las redes de banda ancha, tanto fijas como móviles, sigue avanzando y lo seguirá haciendo en el futuro, pero su ritmo de crecimiento lo marcará en todo caso, la oferta y sobre todo la demanda: el usuario final.

Por último, y no por ello menos importante (y menos en la actual coyuntura económica), la industria audiovisual, la fabricante española especialista y líder mundial en su segmento, y las empresas instaladoras e integradoras de telecomunicaciones verdaderos expertos en la “última milla”, todos en su conjunto, precisan de plazos razonables y estabilidad en los mercados para continuar su ya iniciada evolución, manteniendo el liderazgo; un cambio brusco provocaría la pérdida de miles de puestos de trabajo en pymes y micropymes, así como un serio riesgo de deslocalización de creación, innovación y producción/fabricación en uno de los pocos segmentos, en los que la industria española tiene presencia significativa en el contexto internacional.

El proceso de “re‐antenización” con motivo de la liberación del Dividendo Digital.

Los representantes de la industria española de diseño y fabricación de equipos de recepción y distribución de señales de televisión, líderes mundiales en su segmento, junto con FENITEL, y como actores necesarios en la implantación del proyecto de liberación de frecuencias denominado Dividendo Digital, partiendo de la información que figura en el borrador de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), se han dirigido recientemente al Ministerio de Industria, el pasado 17 de abril, señalando las cuestiones clave que, los representante de los mayores expertos en España en la materia, entienden deben y pueden darse para garantizar a la sociedad, a los radiodifusores y al Gobierno de España, en el contexto socio‐económico que estamos viviendo, una liberación del Dividendo Digital con éxito.

Conclusiones:

Desde FENITEL, se refrenda, una vez mas, el compromiso del sector con el desarrollo de las TIC, de la Sociedad de la Información en España. Como no podía ser de otra forma la Federación Nacional de Instaladores e Integradores de Telecomunicaciones apoya, de forma 4incuestionable, el desarrollo y despliegue de las redes de acceso ultrarrápido, tanto fijas como móviles, como base del progreso de nuestra sociedad, y como desarrollo de la propia actividad presente y futura de sus empresas representadas. Ahora bien, entendemos que este despliegue de las nuevas redes puede y debe realizarse de forma compatible con la presencia en el mercado de tecnologías, solo aparentemente mas tradicionales que, hoy en día, suponen la única forma posible de acceder a servicios de interés público como la televisión, para una inmensa mayoría de los usuarios, los ciudadanos de España. De no proceder de esta manera, corremos el serio riesgo de que los punteros sectores de la fabricación y de la instalación e integración, entre otros, queden debilitados, quien sabe si de forma irreversible, y resulte así inviable cumplir los objetivos de desarrollo fijados tanto en la Agenda Digital Europea 2020, como en la nueva Agenda Digital Española.

Pensando y creyendo en el interés general, decir no por más alto más claro: NECESITAMOS SEGURIDAD JURÍDICA.

26 de abril de 2012

Artículo de opinión: Miguel Ángel García Argüelles. Director Gerente de FENITEL. 

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